Un marido, tenía la costumbre de sacar el perro a pasear cada noche. Ese paseo era largo ya que era parte de una rutina de ejercicios.
A la esposa no le molestaba la idea de que su esposo paseara el perro toda la noche así se tardara dos horas.
La tarea de pasear el perro todas las noche era una indispensable que hombre nunca se negaba en realizar.
Una noche el marido le dio la gripe y estaba tan enfermo que no podía ni pararse de la cama. Esa noche el perro se puso ansioso y comenzó ladrar ya que quería dar su acostumbrado paseo, pero su amo no podía sacarlo porque estaba enfermo.
La esposa desesperada por los ladridos decidió tomar el lugar de su marido, tomo al perro y lo sacó a pasear.
Para su sorpresa el perro tiró con fuerza de la correa y la condujo a la otra calle donde había una casa en la esquina y comenzó a arañar la puerta de esa casa. Una voz femenina gritó: "Hoy llegaste tarde pero ya voy cariño."
Pronto la puerta fue abierta por una mujer joven y atractiva en una bata tipo baby doll, y el perro corrió hacia un plato de carne que le esperaba - como de costumbre.
ahora entiendo porque mi mujer no queria que yo paseara el perro
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